Funchal, situada en la costa sur de Madeira, adorna una bahía abrazada por el océano Atlántico. Como capital y epicentro del archipiélago, es un vibrante centro turístico, cultural y comercial.

Porto Moniz es un destino imprescindible que no debe perderse, ya sea por su impresionante belleza natural, los senderos que serpentean por el bosque de Laurissilva, las emblemáticas piscinas naturales o su rico patrimonio histórico y cultural.

Situado en la costa suroeste de la isla de Madeira, el municipio de Ponta do Sol es famoso por su abundante sol durante todo el año. Esto la convierte en un destino favorito para los amantes de la playa y la naturaleza que buscan lugares idílicos para tomar el sol y conectar con el bello entorno.

El municipio de Câmara de Lobos cuenta con un rico legado histórico, caracterizado por cautivadores monumentos e impresionantes paisajes atlánticos. En particular, es famosa por su centenaria tradición pesquera, que añade encanto e importancia cultural a la zona.

Caniço, en Madeira, es un destino cautivador, que ofrece bellos paisajes, fabulosas playas y excelentes instalaciones deportivas. Los turistas acuden aquí en busca de diversión, descanso y la famosa Reserva Natural Parcial de Garajau. Con una mezcla de modernidad y encanto rural, Caniço también cuenta con buenos hoteles y restaurantes.